CENSO INVERNAL PARA EL ATLAS EN CASTIELFABIB

26 de Enero 2014




A la salida del sol llegaba al Hontanar, caserío en ruinas en la N-420, de Teruel-Cuenca, a una altitud 1222 m.s.n.m. día despejado, sin viento y con escasos 3ºC.  En el primer abrevadero, sobre las ramas de un escaramujo se soleaban jilgueros (Carduelis carduelis), verderón común (Carduelis chloris), verdecillo (Serinus serinus) y pinzón vulgar (Fringilla coelebs). Sobre dos enormes nogueras próximas un zorzal charlo (Turdus viscivorus), un nutrido grupo de pardillos (Carduelis cannabina) y un solitario escribano soteño (Emberiza cirlus).

La Nava.

Seguí ganando altura por una perdida senda que se metía en el pinar todavía en sombra por lo que tuve que abrigarme, un grupo de escribanos montesino (Emberiza cia) y carbonero garrapinos (Parus ater) eran los únicos que se dejaron ver hasta ganar la colina próxima al Frontón, a 1300 metros. Después he visto en los planos que cerca de la cumbre a hay una microreserva de flora en la gran Sima de El Frontón, tendré que buscarla por si depara alguna sorpresa ornítica en época de reproducción.


Después se abrió el pinar para dar paso a los rentos en ruinas que anticipan la proximidad de la aldea de La Nava, que aunque sin ningún habitante sigue siendo patente su uso temporal para cerrar los ganados, esa soleada mañana solo ocupaba una de sus calles un bando de 6 perdices (Alectoris rufa), sobre los tejados de la única casa bien conservada como segunda residencia había dos chovas piquirroja (Pyrrhocorax pyrrhocorax). En la fuente de la Nava pude observar carbonero común (Parus major) y una pareja de curruca rabilarga (Sylvia undata).

 Cuervo (Corvus corax).

De regreso por la vertiente norte del Frontón  pude observar una pareja de cuervos (Corvus corax) y en la umbría herrerillo capuchino (Lophophanes cristatus) y agateador común (Certhia brachydactyla). Sobrevoló los campos de cereal arados cerca de la carretera de Arroyo Cerezo un arrendajo (Garrulus glandarius).


Ya en la nacional y de regreso termine las especies observadas añadiendo un cernícalo vulgar (Falco tinnunculus) y en túneles bajo la carretera dos nidos de golondrina daúrica (Cecropis daurica) uno de los indicios más claros de presencia de una especie que ahora estará alimentándose en tierras más cálidas y posiblemente los nidos más altos del País Valencià, 40º 06' 49.0'' 01º 21' 44.8'' a 1.179 m.s.n.m. y el más alto 40º 06' 44.1'' 01º 22' 18.6'' a 1.229 m.s.n.m.

 Castielfabib en junio de 2013.



Solo 19 especies en un paseo circular de 5.4km, pero estas tierras ahora aletargadas por la altitud seguro que esconden muchas más especies en época reproductora, ahora un reino de tranquilidad y belleza agreste.

El recorrido de color naranja es el realizado esta jornada invernal